La herencia espiritual dejada por San Juan Leonardi...
… ha quedado como un signo seguro e indeleble en la pequeña barquichuela (como él solía llamar a nuestra Familia Religiosa). Tan rico ha sido este tesoro que junto con el actuar del Espíritu Santo han permitido que nuestra apreciada Orden llegase hasta nuestros tiempos.
Desde los inicios...
… la radicalidad evangélica distinguió la vida del fundador y de los primeros compañeros. El apostolado y la vida comunitaria se convirtieron en los dos pilares en que se basó su testimonio de vida.
Las reformas del Concilio de Trento...
… infundieron en el corazón del P. Juan y en el de sus compañeros un fuerte deseo de renovación. Como verdaderos protagonistas de este movimiento llevaron esa transformación a todos los ámbitos de la vida eclesial: liturgia, catequesis, celebración de los sacramentos, devoción mariana, reforma de los religiosos misioneros para realizar el profundo anhelo de la proclamación del Evangelio a todos los pueblos.
Es así que bajo estas aspiraciones...
… desde el 1 de septiembre de 1574, en la pequeña iglesia de Santa María de la Rosa (Lucca), San Juan Leonardi inició este gran camino.